OpenAI, la empresa de ChatGPT, despide a Sam Altman, su jefe ejecutivo, por pérdida de confianza | Tecnología

El consejo de administración de OpenAI, ha anunciado este viernes por sorpresa el despido de Sam Altman, al que acusa de no haber sido sincero con la compañía, por pérdida de confianza. Altman deja de ser consejero delegado de la compañía y abandona el consejo de administración. Mira Murati, directora de Tecnología de la empresa, ocupará el cargo de directora general interina mientras se busca a un sustituto permanente.

“La salida del señor Altman se produce tras un proceso de revisión deliberativa por parte del consejo, que llegó a la conclusión de que no fue siempre sincero en sus comunicaciones con el consejo, obstaculizando su capacidad para ejercer sus responsabilidades. El consejo ya no confía en su capacidad para seguir dirigiendo OpenAI”, dice en un comunicado la empresa creadora de ChatGPT, que ha expuesto al mundo la capacidad de la inteligencia artificial generativa.

Altman se convirtió en la tarjeta de presentación de OpenAI, la persona que ponía rostro al auge de la inteligencia artificial. No había foro al que no fuera invitado. Visitó la Casa Blanca, compareció ante el Congreso y en sus viajes internacionales también se reunía con gobernantes y autoridades como embajador de la inteligencia artificial. Greg Brockman, que ayudó a Altman a fundar open AI, dejará el cargo de presidente del consejo y permanecerá en su puesto en la empresa, reportando al primer ejecutivo.

En un comunicado, el consejo subraya que OpenAI se estructuró deliberadamente para impulsar la misión de que la inteligencia artificial beneficie a toda la humanidad y asegura que sigue plenamente comprometido con esta misión. “Agradecemos las numerosas contribuciones de Sam a la fundación y el crecimiento de OpenAI. Al mismo tiempo, creemos que es necesario un nuevo liderazgo a medida que avanzamos”, indica.

La compañía no da explicaciones de qué es lo que ha motivado la pérdida de confianza en Altman. La empresa estaba inmersa en una colocación de acciones en la que aspiraba a una valoración cercana a los 90.000 millones de dólares. Las acciones a colocar no eran de una ronda de financiación a través de una ampliación de capital, sino que procederían de las que tienen los empleados de la compañía, que lograrían con la operación enormes plusvalías. También se apuntaría unas enormes ganancias sobre el papel Microsoft, que controla un 49% del capital y que pactó una multimillonaria inversión en OpenAI en enero pasado con una valoración de referencia de cerca de 30.000 millones de dólares.

Sustituta provisional

Miembro del equipo directivo de OpenAI durante cinco años, la sustituta provisional de Altman, Mira Murati, ha desempeñado un papel fundamental en la evolución de OpenAI. “Aporta un conjunto único de habilidades, comprensión de los valores de la empresa, operaciones y negocios, y ya lidera las funciones de investigación, producto y seguridad de la empresa. Dada su larga trayectoria y su estrecha relación con todos los aspectos de la empresa, incluida su experiencia en gobernanza y política de IA, el consejo cree que está especialmente cualificada para el cargo y prevé una transición fluida mientras lleva a cabo una búsqueda formal de un consejero delegado permanente”, indica el comunicado.

El consejo de administración de OpenAI está formado por el científico jefe de OpenAI, Ilya Sutskever; los consejeros independientes Adam D’Angelo, jefe de Quora, y Tasha McCauley, y por Helen Toner, del Georgetown Center for Security and Emerging Technology.

[Noticia de última hora. Habrá ampliación en breve]

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By Silverio Guevara Luján

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